Conoce la historia de Stephanny Sophia Moralé González, estudiante de Ingeniería de Sistemas en la UNAD, quien desde Chachagüí, Nariño, descubrió en la educación virtual la oportunidad de crecer y proyectar su pasión por Corea del Sur
(Foto: Stephanny Sophia Moralé González mientras estudia coreano desde su casa)
Su primer acercamiento a ese país llegó a través de una boy band que despertó su curiosidad adolescente. Lo que para muchos habría quedado en una moda pasajera, en ella se convirtió en el inicio de una búsqueda más profunda: quería ir más allá de la música y adentrarse en la riqueza de su idioma, su cultura, su innovación y, sobre todo, en la forma en que un país que atravesó enormes dificultades logró convertirse en referente global de educación y desarrollo tecnológico. Tanto fue su interés que, de manera empírica y movida únicamente por la pasión, comenzó a estudiar coreano por cuenta propia, explorando el idioma con disciplina y dedicación. Esa chispa se transformó en un propósito de vida.
La UNAD fue el puente que le permitió dar forma a ese sueño. Gracias a la flexibilidad de la modalidad virtual, Stephanny no solo avanza en su formación académica desde Nariño, sino que también ha podido dedicar tiempo a proyectos personales que hoy le abren puertas en escenarios internacionales. Uno de ellos es su participación en Hallyu Colombia, en alianza con la Embajada de Corea, donde ha contribuido a la difusión de la cultura coreana y al fortalecimiento de lazos interculturales.
Ese camino la llevó aún más lejos: Korea.net, la plataforma oficial de noticias del gobierno surcoreano, la invitó a sumarse como creadora de contenido y gestora cultural. Desde allí escribe artículos, comparte experiencias y genera puentes interculturales que conectan a jóvenes de diferentes rincones del mundo. Todo esto, sin salir de su casa en Chachagüí, apoyada únicamente en la virtualidad.
Detrás de su entusiasmo y logros se encuentra la fuerza de una historia marcada por la adversidad. Tras graduarse del colegio, la enfermedad de su padre puso en pausa muchos de sus planes. Stephanny pensó en renunciar, pero la fe, el apoyo de su familia y la posibilidad de estudiar de manera flexible en la UNAD le recordaron que no estaba sola. “La vida puede ser difícil, pero siempre hay que darle una buena cara. Gracias al internet y a la UNAD he encontrado oportunidades que nunca imaginé”, confiesa con gratitud.
Hoy, a sus 19 años, sueña con postularse a becas en Corea, perfeccionar el idioma y crear proyectos que integren sus conocimientos en ingeniería de sistemas con su experiencia cultural. La historia de Stephanny es, en esencia, la historia de miles de jóvenes colombianos que encuentran en la educación virtual de la UNAD no solo un camino académico, sino la posibilidad de alcanzar sueños.