La Escuela de Ciencias Básicas, Tecnología e Ingeniería ECBTI de la UNAD en el Eje Cafetero, está desarrollando el proyecto de investigación denominado: “Diseño e implementación de un transductor inalámbrico de conductividad eléctrica”. Con el objetivo es entregar a los agricultores una herramienta que les permita visualizar datos de concentración total de sales del suelo.
Los ingenieros y docentes Joan Sebastián Bustos Miranda y Edwin David Tamayo Álzate son los coordinadores de dicho proyecto.
Existe gran preocupación cuando los suelos se vuelven salinos, lo que conlleva a problemas de productividad, contaminación de suelos, agua y costos en el manejo de cultivos. Por ello, por medio del la primera generación del transductor, se logró obtener información de fácil acceso para la agricultura de precisión, el cual permite determinar el estado nutricional de las plantas.
Con estos desarrollos se facilita la labor de los agricultores teniendo en cuenta los cambios climáticos que en la actualidad son muy marcados, afectando directamente la conductividad eléctrica (CE), pues a medida que el suelo se seca, la conductividad eléctrica (CE) de la solución del suelo va en aumento. Al no estar evaluado y monitoreado constantemente la cantidad de sales totales en los suelos de producción agrícola se corre el riego de que se tomen estrategias erradas de fertilidad y manejo de suelos.
Para el diseño del transductor se utilizó un método que consta de dos electrodos que se colocan en línea recta y a una misma profundidad de penetración, las mediciones de resistividad dependerán de la distancia entre electrodos y de la resistividad del terreno y por el contrario no dependen en forma apreciable del tamaño y del material de los electrodos, aunque sí dependen de la clase de contacto que se haga con la tierra.
Este tipo de proyectos se enmarcan en los intereses actuales de los estudio del suelo, que se ha convertido en una parte fundamental de la geofísica; por ello, se han desarrollado diferentes herramientas para la medición. Entre las características más analizadas en el estudio de los suelos es la resistividad, que se adquiere hallando el valor de la conductividad eléctrica de éste, la cual es útil gracias a las múltiples relaciones que se pueden extraer con la textura, el contenido del agua, contenido de materia orgánica y los nutrientes orgánicos, permitiendo con ello orientar las decisiones de manejo de la fertilización, riego y preparación de suelo entre otras.