En el marco del 30 aniversario del programa de Comunicación Social de la UNAD, destacamos la trayectoria de Germán Alberto Sáenz Pacheco, un pionero de la primera generación de este programa, quien ha dedicado más de 25 años a la enseñanza y al impacto social a través de la comunicación. Con una formación diversa que incluye títulos en Comunicación Social con énfasis en Comunicación Comunitaria, Administración Agropecuaria, especialización en Políticas Culturales y Gestión Cultural, y una maestría en Educación Ambiental, Germán Sáenz ha sabido entrelazar disciplinas para crear una carrera enfocada en el servicio a las comunidades.
La trayectoria de Germán Alberto Sáenz Pacheco resalta como un ejemplo de compromiso y visión. Desde su inicio en el Centro de Educación a Distancia (CEAD) de Sogamoso, Germán fue el primer graduado del CEAD no solo del programa, sino también de la Escuela de Ciencias Sociales, Artes y Humanidades, marcando un hito en la historia de la universidad. Al respecto, Germán rememora: “Los registros no mienten, fui el primer egresado de la Escuela de Ciencias Sociales, Artes y Humanidades. Comunicación tenía nueve meses y Psicología diez, por ello fui el primer egresado”.
El inicio de una trayectoria
Germán llegó a la UNAD con el deseo de complementar su formación en Administración Agropecuaria. Sin embargo, al ingresar al programa de Comunicación Social descubrió un espacio que le permitió comprender que el conocimiento no se impone, sino que se gestiona. Desde sus primeros días como estudiante entendió la importancia de construir comunidad y de utilizar la comunicación como herramienta para conectar realidades y experiencias.
"Los problemas del campo estaban ligados a la comunicación", señala, enfatizando que su formación previa le ayudó a ver la necesidad desde un enfoque más comunitario en la transmisión de conocimientos. Este pensamiento lo llevó a encontrar en la UNAD el lugar perfecto para desarrollar esa vocación.
De estudiante a docente
Después de graduarse Germán no se alejó de la UNAD, su transición de estudiante a docente fue fluida, ya que siempre había visto a sus compañeros como pares con quienes compartía ideas y experiencias. “El estudiante es un par”, afirma, señalando que la enseñanza siempre fue un diálogo, una oportunidad para seguir aprendiendo junto a los demás.
Su experiencia como docente en la UNAD ha estado marcada por momentos significativos. Desde su trabajo con estudiantes que hoy están bien posicionados en el mundo laboral, hasta recibir invitaciones a momentos especiales en sus vidas, Germán ha sido testigo del impacto que puede tener un profesor en el futuro de sus estudiantes. "Es algo muy gratificante cuando te recuerdan, cuando un exalumno te invita al bautizo de sus hijos o te recomienda un libro que cree que te gustará. Es ahí donde te das cuenta de que la enseñanza es un ciclo continuo", reflexiona.
Así son los comunicadores Unadistas
Para Germán el perfil del comunicador de la UNAD está claro: "recuerdo una frase de Mario Kaplun que decía: 'La comunicación es una calle ancha que amo transitar. Se cruza con el compromiso y hace esquina con comunidad.' A esta idea, le sumaría la solidaridad que promueve nuestro rector", menciona, recordando una frase que para él encapsula el espíritu de la universidad. En su opinión, un comunicador Unadista no solo transmite mensajes, sino que lo hace desde un enfoque solidario y comunitario, siempre buscando construir en conjunto con su entorno.
Evolución del Programa: De los fundamentos a la innovación
Desde su creación el programa de Comunicación Social de la UNAD ha experimentado una transformación significativa. En sus inicios se centraba en la enseñanza de conceptos y técnicas tradicionales, con un enfoque en la comunicación comunitaria. Germán Alberto Sáenz Pacheco, el primer graduado del programa en el CEAD Sogamoso y quien ha vivido la evolución del mismo, indica que hoy en día el programa enfatiza en una narrativa colaborativa, señalando que "antes era la narrativa individual, ahora es colaborativa; diríamos la 'Wikipedia' de la comunicación, colaborativamente construimos nuestra historia, nuestra realidad, nuestra comunicación". Esta migración ha permitido que los estudiantes aprendan a narrar, diagnosticar y entender su entorno de una manera más integral. La tecnología siempre ha estado presente, y, como afirma Germán, "no es buena ni mala, es la forma como la utilizamos". En este sentido, el programa considera la tecnología como un soporte para construir el tejido social, transformando el aprendizaje en una experiencia significativa y adaptativa en un contexto de comunicación en constante cambio.
Un comunicador comunitario y un docente de corazón
La historia de Germán Alberto Sáenz Pacheco es un claro ejemplo del Talento Unadista, un comunicador que ha sabido combinar su pasión por la enseñanza, la cultura y el servicio comunitario. Desde su formación como el primer egresado del programa de Comunicación Social en el CEAD Sogamoso, hasta su papel como docente e investigador, Germán ha sido un actor clave en el fortalecimiento de las comunidades a través de la comunicación.
Su mensaje final para las nuevas generaciones de comunicadores es un llamado a volver a la lectura, a tener siempre presente el contexto y a escribir pensando en el lector. "Escriban para el lector, no para el autor", concluye, con la certeza de que la comunicación tiene el poder de transformar vidas y tejer historias compartidas.